El primer día de la novena de San
Isidro, fue contratada Francisca Capilla
Rodríguez por el Padrón de los Labradores para trabajar indefinidamente los
campos fértiles de la eternidad. Aunque ella estaba bastante preparada y
curtida, pues ya tenía las manos bien encalladas y la espalda curvada de cortar
tabaco, lino, recoger aceitunas…, tanto en los campos terrenales de Fuente Vaqueros
como de Fuente Álamo, todos rogábamos para seguir disfrutando de su experiencia
entre nosotros; aunque ella ya había cogido el hato y, como buena trabajadora
del campo, no podía negarse a la llamada de su Patrón. Porque a los buenos
trabajadores, una vez cumplida su misión en la tierra, los necesita San Isidro
para cultivar los campos verdes de la esperanza y siembren semillas que aquí
recogeremos. Ese es el consuelo que deben tener sus hijos, nietos, amigos,
vecinos de su Fuente Álamo. Pero no solo San Isidro se acordó de ella para
trabajar sus campos, también desde algún tiempo atrás, la Virgen del Rosario la
quería tener a su lado como ejemplo de madre, o San Antonio de Padua como
compañera de camino en sus predicaciones, y el Sagrado Corazón de Jesús para
ayudarle a alimentar pasión, a quienes
tanta devoción tenía. Fue San Isidro finalmente quien la convenció.
En sus últimos días quiso despedirse de
nosotros con dedicatoria especial a sus hijos, pues sabía que no podía
renunciar a esa especial llamada. Vaya
Usted con Dios, Paquera, hasta siempre.
Como todos sabéis a Francisca Capilla Rodríguez, le dedicamos dos capítulos en la página de nuestro pueblo y que aquí dejo los enlaces:
https://historiadefuentealamo-jaen.blogspot.com/2014/06/inmigracion-y-acogida-en-fuente-alamo.html
https://historiadefuentealamo-jaen.blogspot.com/2014/07/francisca-capilla-rodriguez-la-paquera.html
Buenas tardes amigo Domingo. Hay noticias que se están uno recreando
ResponderEliminarporque las has vivido, te ha ocurrido, o simplemente te gustanan porque son del pueblo en donde nos criamoos.
Hoy la noticia es triste, al saber que la Paquita de braguetas nos ha dejado. Pues por este medio quiero quiero darle mi más sentido pésame a toda la familia.Que Descanse en PAZ
Gracias Antonio, por aportar tu comentario y dejar aquí tu sentido pésame para la familia de nuestra querida Paquita. Como bien dices, es una triste noticia, pero también es parte de lo que hemos vivido junto a nuestros vecinos y que nos traen muchos recuerdos, ahora debemos quedarnos con los más bonitos. Un abrazo.
ResponderEliminarDomingo, a pesar del legado que han dejado Francisca Capilla Rodríguez (“La Paquera” de Fuente Álamo) y Juan Ibáñez Sánchez (“Andaluz” de Fuente Álamo), sin duda sus vidas eran más importantes. Como bien dices: “las carreteras, caminos, veredas, calles de Fuente Álamo echaran de menos sus pisadas”.
ResponderEliminarLos dos, uno tras otro, han hecho el camino hacia el horizonte final de la vida. Permítanme su familiares despedirme con unos versos de Miguel Hernández (el poeta de los “Aceituneros de Jaén”), aunque cambiando (¡Osado de mi!) sus versos dedicados al pueblo luchador con los nombres de Francisca y Juan:
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Francisca Capilla…, Juan Ibáñez:
Vientos del pueblo me llevan,
vientos del pueblo me arrastran,
me esparcen el corazón
y me aventan la garganta.
Francisco Capilla…, Juan Ibáñez:
Si me muero, que me muera
con la cabeza muy alta.
Cantando espero a la muerte,
que hay ruiseñores que cantan.
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Imitando tu despedida: Vayan los dos con Dios.
Santiago
Querido, Santiago. Muchas gracias, por palabras para estos dos buenos vecinos y que como amigo y vecino de ellos, me permito en nombre de la familia y de todos los fuentealameños agradecerte tus sabias palabras, así como la cita que siempre tan apropiadamente dejas reseñada. Yo me he permitido acompañar las imágenes de Juanito “El Andaluz” con la “Elegía a la muerte de Ramón Sitjé”, cuyo autor hemos coincidido en traer a colación. De Paquita "La Paquera" podría haber puesto "Llanto por Ignacio Sánchez Mejías", de su paisano de nacimiento, siempre nos quedará otros recordatorios u homenajes.
EliminarUn abrazo