sábado, 18 de julio de 2020

ANGEL MORENO MARTOS: “KUBALA” DE FUENTE ÁLAMO” II PARTE


Ángel es el menor de siete hermanos, fruto de matrimonio entre Rafael Moreno Ibáñez “Perote” y Encarnación Martos Saez “Perejila”, de los cuales  actualmente solo quedan dos en vida. Descendiente de la saga “Moreno”, de tan fuerte arraigo fuentealameño y tan estrechamente unidos a los acontecimientos sociales y políticos de la Aldea, así como a la cultura musical de los años 60, junto con su hermano Mateo “Perote”. Apodos que para él, es todo es un orgullo llevarlos. Fue como el que dice el retoño, pues se lleva con su hermano Francisco 7 años de diferencia. Nació en Fuente Álamo el 7 de abril del 1947 en la casa familiar situada en una bifurcación ascendente de calle Sacristán, que últimamente fue de José “Benino”. De su infancia apenas tiene recuerdos, no obstante cuando se reunía con su amigo Santiago Cervera, le hacía recordar momentos de aquella infancia, como cuando ponía las trampas para pillar pájaros, el frío que hacía y como otros niños se las quitaban, la regañina de hermano, o cuando se bañaban en los estaques y pillaban ranas y algunas otras situación, que apenas recordaba, pero que se las refrescaba Santi. Sí que recuerda que jugaba bien al fútbol en un campo improvisado de las eras de la Torre. Jugaban con una pelota de trapo y otra que le regaló una tía suya de Córdoba, que era de goma, pero apenas aguantó unas cuantas patadas. A él le llamaba “Kubala”, “pásala Kubala, pásala Kubala”, le decían y con ese apodo se quedó en Fuente Álamo, en otros sitios no le conocían así.
Hizo la Primera Comunión en la Iglesia de San Antonio de Padua y después la merienda en la escuela, aunque no recuerda mucho de aquel acto.  El maestro era Don Manuel y  sus amigos de la infancia eran el referido Santiago Cervera “Tufos”, Antonio Pérez “Nono”, Antonio Vega “Bañero”, que era su compañero de pupitre y con quien coincidió en la mili. Eran los más traviesos, recuerda que Antonio y él se orinaron en los tinteros de los pupitres, y se armó una buena, el maestro tenía una regla, y le dio unos reglazos fuertes. Aprendió a leer y escribir y las cuatro reglas, recuerda que en los recreos les llevaban a los trigos a quitar amapolas y malas hierbas.
            No recuerda haber trabajado mucho en el campo, pero alguna temporada estuvo recogiendo aceituna en el Cortijo el Coscojar a corta edad. Le ayudaba a sus padres y, como hemos relatado en otra parte de su historia, con la música a  otra parte. Le pagaba algo por las actuaciones, muy poco, aunque no lo recuerda.
Con 13 ó 14 años se marcharon a vivir a Alcalá la Real a la Calle Corredera, sería en torno al año 1960. Estuvo trabajando, más bien como ayudante de su hermano Rafael, haciendo bovedillas en Vialca, que tenía la fabrica en la zona del Coto, en el campo que ahora hay unos los colegios.
Antes de incorporarse al servicio militar, se fue a trabajar a Seu de Urgell, tendría 16 ó 17 años, tuvo que ser entre los años 1961 y 1965.  Estuvo allí, con sus hermanos Rafael y Paco y su cuñado Eladio. El era el más pequeño. Allí estaba Quini de la Sancha, que trabajaba en la obra, y otros fuentealemños que  trabajaban con los payeses: Matías, Nono, José “El Largo”,  José Pedro del Alcalde...
Es de la quinta del 68, la instrucción la hizo en Viator (Almería) allí coincidió con quien después fuera Camilo Sesto, por entonces vocalista integrante del grupo “Alex y Los Botines”. Ángel estaba en el Batallón 23 y Camilo en el Batallón  22, formaban uno enfrente del otro.  La mili la hizo en Granada en el Cuartel de “Córdoba 10” colocándose en la banda de música gracias a sus conocimientos musicales. Estuvo muy a gusto, allí vestía de paisano porque formaron un grupo musical que tocaban para los mandos en fiestas privadas, ellos estaban liberados de formar, de levantarse temprano, estaban excluidos de maniobras y de rebajados de servicios, así como le estaba permitido dejarse el pelo largo. Los altos mandos se creían que eran un grupo musical de Granada, pues el Teniente les había dicho que no podían decir que eran militares, porque se le podía caer el pelo a él, e incluso cobraban algo, ello lo pude corroborar  Antonio Vega “Bañero”, que era de un remplazo posterior y  le metió él en la banda, para tocar el bombo. Recuerda que el Brigada, le decía: “tu paisano es muy ceporro para la música, llévatelo y lo enseñas a tocar bien”. Después aprendió y  estuvieron haciendo desfiles en Ronda y Granada. De su quinta son Francisco Escribano Moyano, Manuel Aguilera Pérez “Manolín”, José Jiménez León, Antonio Aguilera Cano “de Clavijo”, y el referido Antonio Vega Ávila.
Una vez que finalizó la mili, se fue a Madrid a trabajar con un primo por parte de Los Perejiles que tenía una pescadería y tocaba la trompeta, estuvo 3 ó 4 meses. Un día fue a la Castellana a una oficina de extranjería, echó los papeles para Suiza, y estuvo trabajando en un restaurante unos 6 meses a las afueras de Zurich.
Cuando volvió de Suiza, fue a ver a su hermano Mateo que vivía en Hospitalet de LLobregat, pues iba de paso para irse a Palma de Mallorca. Su hermano le recomendó a un amigo, para que trabajase como repartidor de butano, donde estuvo dos años porque daban buena propina, y a la vez compaginaba el trabajo con la música.  Al final se quedó allí unos 4 ó 5 años, donde se casó en 1974 y tuvo un hijo. Después vivió en  la Urbanización de  Cardedeu hasta que se separó, allí fue vecino de Eugenio, el humorista, quien vivió en la calle de abajo, unos 5 años hasta que falleció. Después se compró una casa en la playa en Montgat.
Aficionado al fútbol como dijimos al inicio, no podría ser de otro equipo que el de su ídolo “Kubala” y se hizo socio de número del Barça, durante más de veintitantos años.
En el laboratorio Martínez Llenas que comercializaba la marca “Galeno” del famoso esparadrapo, ha estado trabajando 28 años en expediciones (pedidos), tanto a nivel nacional e internacional. Como hemos dicho allí conoció a una compañera del trabajo con la ha estado casado 25 años, y con la que tuvo un hijo que desgraciadamente falleció el 23 de diciembre de 2004, con 29 años, triste acontecimiento que le ha afectado bastante, en los recuerdos y en la vida misma.
Cuando se jubiló invirtió sus ahorros, como no podía ser de otra manera, en el montaje de un espectáculo musical tipo Karaoke, en Lucena. Se hacían concursos importantes y se daban premios de clasificaciones a nivel casi profesional. El  cantaba para animar a los clientes y venía mucha gente hasta de Málaga para escucharle. Pero los negocios familiares a veces no salen bien y supuso su ruina económica, que se unión a la familiar.
 Actualmente, decidió un retiro tranquilo alejado de todo el mundo vivido, y se ha instalado en la casa familiar de Alcalá la Real, donde lleva una vida tranquila, con su huerto, su karaoke y  junto a su loro “Yako”, que nos estuvo entreteniendo o interrumpiendo con su charla durante toda la entrevista.

sábado, 4 de julio de 2020

ÁNGEL MORENO MARTOS: “EL BATERÍA DE FUENTE ÁLAMO”. I PARTE.


En una instantánea de época, que me había enviado un seguidor del blog, tomada en el Salón Porruo de Fuente Álamo en los años 60, aparecía en plena actuación un grupo musical, en cuyo bombo podía leerse “Los Ajpej”. En un intento de identificar a sus componentes, pues de uno de ellos me sonaba la cara en referencia a otras fotografías antiguas que conservaba,  pude localizar al batería. Él fue quien me ayudó a saciar mi curiosidad, y a seguir investigando hasta encontrar, tras aquella imagen, la historia de un gran músico fuentealameño. Después me ayudó a identificar a todos sus componentes y a desgranar la historia del referido grupo musical. En dicha foto aparecen: Curro, vocalista, Pepe “Tiznao” acordeón (más delgado), Eduardo Parrado, acordeón, (más gordo), Manolo (“Lolo”), saxo, que fue uno de los primeros integrantes de Came ros’s y actualmente toca en la Banda Municipal de Alcalá la Real.  Eduardo Parrado, que de vez en cuando paraba y se iba a fumar o a vender lotería y les dejaba a ellos tocando, algo así como el relaciones públicas. También aparecen sentados en unas sillas unos niños, atentamente escuchando, que bien pudo ser en otros tiempos, el que relata o nuestro protagonista: el batería de la foto: Ángel Moreno Martos.  Un descendiente de la saga “Moreno”, de tan fuerte arraigo fuentealameño y tan estrechamente unidos a la cultura musical de los años 60, junto con su hermano Mateo “Perote”. Un hombre agradecido a su pueblo de nacimiento, que, aunque ha sido un hombre de mundo como veremos, siempre ha tenido en su recuerdo todo lo que representó su infancia en Fuente Álamo, sus amigos de aquella etapa de su vida y sobre todo su primer tambor de la infancia,  por lo que desde el momento en que le propuse que nos contase su experiencia vivida, todo ha sido colaboración y agradecimientos.
Aunque intenté reconducir la entrevista en su aspecto profesional, comenzando por sus inicios en ese mundo, fue difícil no entrar en otros apartados de la vida misma.  Nos cuenta  cómo aprendió a tocar la batería, que fue básicamente viendo tocarla a Manolo “Canuto”. Cuando “Los Canutos” [1] iban a tocar a Fuente Álamo, él se ponía al lado del batería y observaba, se quedaba mirando y escuchando horas y horas para después ensayar con unas latas  en su casa, y como él dice: “vengadalequetepego, dalequetepego”. A veces, el hijo de Canuto, que tocaba el acordeón, le decía al padre: “deja al niño que toque conmigo”, por lo que también tocaba con la batería de ellos cuando iban a las fiestas de Fuente Álamo, siendo él  todavía un crío. Tenía tanta afición que le entró la batería tanto por la vista como por el oído. Después pudo comprarle su hermano Mateo la batería al propio Manolo “Canuto”. Aquella batería se la trajo su hermano amarrada con una correa al cuerpo, cargada en la espalda desde Alcalá la Real (unos 12 km), y no solo el bombo, sino también una caja con los platillos y demás herrajes. Su hermano veía que tenía mucha afición porque tocaba con las latas y unos  palos y quería también que le acompañase al clarinete. Pero toda esa la ilusión, por momentos quedó frustrada cuando su padre le dijo a su hermano que la llevase donde la había traído y que tenía que devolverla porque el niño no tenía que tocar nada, que lo que tenía es que ir a la escuela,  con el consiguiente disgusto para Ángel. Ante la insistencia de su hermano, diciéndole a su padre que era para tocar en las fiestas de Fuente Álamo con él (que tocaba el clarinete), su padre cedió. Ángel enseguida montó la batería y comenzó a acompañar a su hermano en la interpretación de la canción: “Que bichito”.
Cuando apenas tenía unos 10 años formó dúo o grupo con su hermano Mateo y con Fermín de Las Grajeras. También estuvo tocado con un grupo de las Caserías de San Isidro, formado por Benigno y los Funes. Pero realmente en grupos de música estables en Fuente Álamo no estuvo en ninguno. Tocaban en las bodas, en las fiestas que formaban en la calle, en el Salón Porruo… Recuerda que su hermano Mateo y él amenizaron la boda de Antonio Anguita “Braguetas” y Francisca Capilla (1960). Fue en la taberna que regentaba “El Chofer”, en casa de Brígido, donde sobre dos barriles de vino se colocaban unas tablas y se subían. Ese era el escenario improvisado donde tocaban,  entre otras, aquella canción de Lolita Garrido: “Que bichito será”[2]. Tocaban con el clarinete y la batería y él cantaba algo, pero lo que más sonaba era la melodía del clarinete de su hermano. Les pagaban por la actuación, aunque no recuerda la cantidad.
Después de unos años acompañando a su hermano al clarinete formó parte de grupos musicales no estables, formados para actos concretos. Eran  cuatro amigos que tocaban en el Hogar de Alcalá la Real. Lolo de los Came ros’s, les llamaba para formar pequeños grupos para tocar en las fiestas, en bodas en  Ermita Nueva o en Salón de Bodas “Peñalver”, unas veces eran unos y  otras otros. Ángel estuvo en varios grupos musicales, entre ellos, el referido: “Los Ajpej”, cuya denominación corresponde a las iniciales del nombre de sus componentes. Tocó con Pedro “El Taxista”, Pepe “Mochilero” de Puertollano, Curro del Castillo de Locubín, Emilio “El Cara”, Pepe “El Tiznao”, Lolo, Pedro “El Cabezón”, (hijo del Zapatero, que siguió con los Came ros’s en Torremolinos), Pedro “El Lechero”…   Eran grupos que se juntaba y echaban un rato y tocaban de forma eventual donde les avisaban. También estuvo ensayando un poco tiempo con Came ros’s[3], en la Calle Real, pero le sustituyo Aceituno, por lo que nunca llegó a debutar con ellos. 

Tuvo que emigrar y, después de varios avatares, el destino le llevó junto a su hermano Mateo, a Hospitalet de LLobretat. Un día puso un anuncio en una casa de música: “Se ofrece batería” y le llamaron para hacer una prueba en la zona de Horca, cerca de la Plaza Ibiza de Barcelona. Se presentó con los conocimientos y experiencia que tenía de Alcalá la Real y sin batería, pues la había dejado en su casa de Alcalá cuando él emigró. Viendo que se estaba deteriorando, le dijo a su madre que la tirase porque se estaba pudriendo y era muy vieja, pensando en que compraría una nueva si encontraba un grupo, como así fue en Los Kiobas. Se vieron obligados a sacarse el carnet de músico profesional por miedo a que les pudieran sancionar, sería el año 1972. Con aquel carnet ya podía firmar contratos y actuar en salas de baile, pues con carnet anterior solo podía tocar para que la gente escuchase la música, sin poder hacer atracciones de baile.
En Barcelona formó parte de cuatro grupos musicales estables durante más de 25 años. Tocaban por toda Cataluña, sobre todo por la Costa Brava y resto de España. Ellos mismos tenían que montar el escenario y el equipo, que esta transportado por Ángel en su furgoneta.  Ha tocado con Los Kiobas en casi todos los cabaret míticos de Barcelona: Panams Club, Tabú, Villa Rosa, La Buena Sombra, Los Relampagos, en la zona de la Rambla, donde guarda muchos recuerdos y anécdotas e historias entre mujeres de la vida y chulos.
Con el grupo Los Kiobas, hicieron una tournée de una semana en Barcelona con Manolo Escobar y Los Chichos. También fueron grupo telonero de Lola Flores en el Camping Toro Bravo de Castellsdefels (Barcelona) y de Rocío Jurado en el Palacio de Deportes de Santa Coloma de Gramanet, donde también iba en el espectáculo el humorista Manolo Vega, con quien por cierto, y como anécdota puede contar que tuvieron sus más y sus menos en cuanto a quién debía cerrar el espectáculo. Al final se impuso la decisión de Pedro Carrasco, y fue Rocío Jurado quien lo cerró. También recuerda como anécdota, que el batería de Rocío Jurado llegó un poco tarde y no le daba tiempo a montar su batería, por lo que le dijo a Ángel que tocaría con la suya, a lo que se opuso Ángel, porque ellos llevaban 4 horas montando, y no era justo que él quisiera llegar y  tocar. Le insistió que ambos eran profesionales y si la rompía se la  pagaba. Al final llegaron a un acuerdo de que el batería de La Jurado le pagaba lo que ganase en esa actuación a cambio de dejarle tocar con su batería. La batería de Ángel era de la marca japonesa Tama, la primera que llegó a España, así como los instrumentos que llevaba su grupo era lo mejor que había en el momento: teclado Hammond, amplificador Leslie 160, la guitarra negra la Spot.
Su representante se llamaba Lozano, después tuvieron como representante a Centaño que era el mismo que tenían Los Diablos y Los Sirex. Cuando su representante firmó el contrato con el representante de la Lola Flores, y le dijeron a Ángel que iban a tocar con ella, dijo: “Si, y también con El Cordobés” porque  no se lo podía creer. Ellos hacían en primer pase, después actuaba el artista y al final volvían a actuar para que la gente siguiera bailando.
El día que se fueron a hacer la prueba para obtener el  carnet de músico profesional coincidió con Los Diablos y Los Tres Sudamericanos. Hicieron un examen de teoría, sobre temas de música.
También han tocado con teloneros de Rumba Tres, Los Tres Sudamericano, con  Camilo Sesto en Alcañiz, quien que se alojaba en el castillo donde solía parar Franco, que  solo abría para las personalidades. Con Los Pecos en el Campo de Horta de Barcelona, dónde  le ocurrió  igual que con el batería de la Jurado, que quería tocar con su batería, pues  Ángel tenía por entonces la mejor  que había en España, aunque después llegaron otras muchas. Con  Pepe da Rosa, actuaron en Barcelona, y como anécdota también nos cuenta que se formó una pequeña discusión porque el avión que traía a Pepe llegó tarde. Ellos ya habían hecho un primer pase  y  no  querían pagarle, mientras que Pepe decía que si no le pagaba, no actuaba; al final aquello se arregló.
Después al grupo se unió la vocalista y animadora era Aurita, una joven espectacular, que animaba bastante las actuaciones y con la que obtuvieron mucho éxito.
Actuaban los fines de semana y durante las vacaciones. En Pamplona, estuvieron 4 días, allí siempre tobaba una banda militar, pero ese año no pudieron actuar,  por lo que cuando comenzaron ellos a actuar la gente empezó a silbarle, y a decirle: “fuera, fuera…”, ellos pensaron en dejar de tocar, hasta que le dijo el que los había contratado que no hicieran ni caso, y que siguieran, porque tocaran los que tocaran, la gente solo querían a la orquesta militar. 
Después de más de veintitantos años con Los Kiobas, se fue al Grupo Santa Fe, actuando en el Dancing Club Paloma.  Donde se bailaba muy bien, se mezclaba la juventud y gente de mucha edad. El Grupo Santa Fe, eran integrantes catalanes y dos andaluces, tocaban todo tipo de música bailable. Con ellos estuvo unos 4 ó 5 años.
Ahora ya no puede tocar lo dejó hace años porque se rompió el calcáneo de pie derecho. Pero la música la sigue llevando por dentro, desde el talón hasta la cabeza.
 CONTINUARÁ CON EL ASPECTO HUMANO DE SU VIDA.






[1]Los Canutos formaron un grupo musical en los años 50 y 60. Era una familia de músicos de Alcalá la Real,  vivían en la zona de El Coto. Eran dos hermanos, uno tocaba el bombo en la banda de Alcalá la Real, después se fueron a Torremolinos. Manolo era el padre del que tocaba el acordeón.



miércoles, 1 de julio de 2020

FAMILIA “MORENO” DE FUENTE ÁLAMO. I PARTE

          La familia apellidada “Moreno” estuvo muy vinculada a Fuente Álamo desde que se creó el partido de campo con entidad propia. A día de hoy, el apellido ha desaparecido totalmente de la Aldea, aunque quedan algunos descendientes de la familia, no así la denominación “Moreno”. Después de más de dos siglos, actualmente en la aldea solo vive Daniel Fuentes Vera, hijo de Antonia Vera Moreno, hija de Josefa  Moreno Ibáñez, hija de Rafael Moreno Pérez, hijo de Antonio Moreno Bermúdez, hijo de Feliz Moreno Hidalgo, hijo de Francisco José  Moreno Castro…, así mismo por la misma línea, dos de los hijos de su hermana Magdalena: Francisco José y Raquel. También son descendientes de los Moreno, la familia Feliciano, Juan y Francisca Ibáñez Sánchez, hijos de María Sánchez Arenas, hija de José María Sánchez Moreno, hijo de Josefa Luisa Moreno Bermúdez, hija de Feliz Moreno Hidalgo, hijo de Francisco José Moreno Castro…, o lo que es lo mismo, la bisabuela de los Ibáñez era hermana del tratarabuelo de Daniel Fuentes. También vive en Fuente Álamo, y muy recientemente, María Jesús, la nieta de Genara Pérez Vera, hija de Sancha Vera Moreno, hija de Josefa  Moreno Ibáñez, hija de Rafael Moreno Pérez, hijo de Antonio Moreno Bermúdez, hijo de Feliz Moreno Hidalgo, hijo de Francisco José  Moreno Castro…

        Tuvieron especial protagonismo e influencia durante la Segunda República y la Guerra Civil. Con anterioridad, en al siglo XIX y principios del XX, algunos de sus miembros fueron alcaldes pedáneos de Fuente Álamo. Por lo que reflejaremos solo los más representativos de la estirpe.
Ya en el padrón de Alcalá la Real de 1801 para el partido de La Rábita, al que pertenecía Fuente Álamo, aparece inscrito José Moreno, 44 años, con un hijo llamado Francisco de 12 años. Éste último pudiera ser Francisco José Moreno Castro (1784) padre de Feliz.
Feliz Moreno Hidalgo (1806-1888)[1]. Hijo de Francisco José Moreno Castro (1789) y de Antonia Hidalgo Arenas. Casado el 23/02/1814 con María Felipa Bermúdez (1797-1839), así consta inscrito en el padrón de 1825, con su hija María. Hijos: María de los Santos, Josefa Luisa, y Antonio. En segundas nupcias casó con Teodora Cano Ruiz (1808), tal y como aparece inscrito en el padrón de 1878, aunque por error se cambia el apellido Hidalgo por Bermúdez. En el padrón de 1837 aparece como el alcalde, y en 1851 aparece como testigo en un testamento también con la distinción de alcalde pedáneo de Fuente Álamo.
Matías Moreno Pérez (1866), hijo de Antonio Moreno Bermúdez y de Francisca Pérez Muñoz y nieto de Feliz. En 1889, con  23 años, era soldado activo. Casado con Emilia Caballero Serrano, hijos: Manuel, María, Victoriana y Gregorio. Alcalde pedáneo conservador de Fuente Álamo (1903/04).
Manuel Moreno Pérez (1862), hijo Antonio Moreno Bermúdez y de Francisca Pérez Muñoz y nieto de Feliz. Viudo en primeras nupcias de Dominga Sánchez Zamora, de cuyo matrimonio nació un hijo llamado Eustaquio; se casó en segundas nupcias con Segunda González, sin que de ésta tuviera descendencia. Dedicado al campo, falleció el 17 de Septiembre de 1937, en su domicilio, durante el bombardeo aéreo en Fuente Álamo, en concreto, en los olivos situados en la parte baja del pueblo. Muchos de los mayores de la aldea, antes niños, recuerdan cómo vieron transportar su cuerpo destrozado con las vísceras fuera en unas narrias llevadas por cuatro hombres.
 Rafael Moreno Pérez (beatón) (1859) hijo Antonio Moreno Bermúdez y de Francisca Pérez Muñoz y nieto de Feliz. Estuvo casado con Rufina Ibáñez Cano (1865) y tuvieron como hijos a Josefa (1888), Vicente (1893), Rafael (1895), Mateo (1900) Antonia y Leocadia (1907). La emigración se llevó en los años previos a la Guerra Civil a Mateo y Vicente, quienes aparecen como labradores en un listado de Cédulas Personales del Ayuntamiento de Huelma del año 1935. Les acompañó su hermana Antonia, casada con Pedro Cecilio. Mateo casado con Ascensión La Chica Campo. Hijos: Mercedes, Inés, Ana y Rafael. Vicente casado en segundas nupcias con Inés Cervera Valverde. Hijos: Magdalena,  Ana, (casada con José Cano Ruiz); Manuel, (casado con María Antonia Galiano Valdivia); Mateo, (casado con Francisca Moyano Cano) y Justo Moreno Cervera (casado con Josefa Justicia Roa). Antonia (casada con Pedro Cecilio). Leocadia, nada se sabe, pude ser un error en la inscripción y ser Antonia. Josefa, casada con Eusebio Vera Castillo. Hijos: Josefa, Sancha, Antonia, Eusebio, y Vicente Vera Moreno, fallecido en la Guerra Civil.



Antonio Moreno Vera (1901), hijo de Antonio Moreno Pérez (1860) y de María Vera Aguilera (1866) y biznieto de Feliz. Soltero y profesional del campo, sus señas personales eran: estatura alta, pelo negro y barba cerrada, cejas al pelo, color cano y ojos claros. Como señales particulares cabe destacar la falta de la pierna derecha. Desde 1937 hasta finalizar la Guerra fue Secretario de sindicato Soc. Agricultores “La Espiga Floreciente” para la colectivización de la tierra en Fuente Álamo, por lo que fue enjuiciado y finalmente absuelto. Según él, aceptó el cargo de secretario por la necesidad que había en su casa.
Marcos Moreno Montes, nació el 18 de octubre de 1915, por circunstancias desconocidas en La Rábita, pues la familia siempre estuvo vinculada a Fuente Álamo. Hijo de Eustaquio y de Araceli. Soltero. Vocal de la Sociedad Cooperativa afiliada a la U.G.T. el 10/04/1936. Después de la Guerra Civil tuvo que refugiarse en Francia, ingresando en un campo de prisioneros, que fueron entregados a los nazis. Fueron trasladados a territorio alemán; en su caso, al campo de prisioneros Stalag o prisión: XI-A (Altengrabow). Desde dicho campo de prisioneros fue deportado al campo de concentración de Mauthausen (Austria), donde ingresó con el número 3.318 el 26 de abril de 1941, dos años después de haber terminado la Guerra Civil Española. Allí permaneció hasta el 5 de mayo de 1945, día en que fue liberado por las tropas aliadas.
Rafael Moreno Ibáñez, (1895) conocido por “Rafalillo Perote”, hijo de Rafael y Rufina. Fue presidente de la Filial Cooperativa de la Sociedad de Agricultores “La Espiga Floreciente” en 10 abril de 1936. De profesión agricultor, ejercía de  barrenero en el pueblo para la extracción de yeso. Estuvo casado con Encarnación Martos Sáez. Hijos: Manuel, Serapia, María Victoria, Mateo (músico), Rafael, Francisco y Ángel (músico).
En una instantánea de época, que me había enviado un seguidor del blog, tomada en el Salón Porruo de Fuente Álamo en los años 60, aparecía en plena actuación un grupo musical, en el círculo de bombo de la batería podía leerse “Los Ajpej”. En un intento de identificar a sus componentes, pues de uno de ellos me sonaba la cara en referencia a otras fotografías antiguas que conservaba y en base al instrumento que tocaba,  pude localizar al batería. Él fue quien me ayudó a saciar mi curiosidad, y a seguir investigando hasta encontrar tras aquella imagen, la historia de un gran músico fuentealameño…CONTINUARÁ




[1] Las fechas de nacimiento han sido tomadas de los distintos padrones de Fuente Álamo, por lo que pueden existir errores y no ser fidedignas.